Del 16 de noviembre 2022
al 14 de enero 2023
Fecha
Del 16 de noviembre de 2022 al 14 de enero de 2023.
Horario
De 11.00h a 20.00h
Del 16 de noviembre 2022
al 14 de enero 2023
Inauguración
Miércoles 16 de noviembre
19.30hrs
Artistas
Vania Montgomery
Cristian Vargas Paillahueque
Esta apertura de proceso Tramas, bocetos y disensos: alternativas para una visualidad local recoge la experiencia del Programa de Residencia de Investigación Curatorial del Centro Nacional de Arte Contemporáneo, a traves de un proceso de investigación que fue acompañado por los equipos del CNAC; particularmente, por el área del Centro de Documentación de Artes Visuales (CEDOC/CNAC), con tutorías personalizadas de profesionales invitadas/os.
La muestra presenta las investigaciones curatoriales que se desarrollaron durante el programa, las cuales se exponen como procesos en curso, y que son motivadas por establecer una serie de tramas posibles para releer la escena del arte contemporáneo en Chile durante las últimas cuatro décadas, visibilizando tópicos y enclaves que, a menudo, quedan fuera de los relatos hegemónicos de la historiografía local. En esta oportunidad se busca socializar esta experiencia a un público abierto a través de una exposición documental de distintos materiales que recogen hitos, temáticas y escenas. Además, se realizarán conversatorios y visionados de obras, con la participación de artistas y agentes relevantes del periodo en cuestión y de ambas investigaciones en curso.
La investigación de Vania Montgomery se titula “Mientras tanto aparece la imagen…” y se aboca a una revisión de la censura, los espacios en blanco y campos de vacío desde el año 1984 hasta la actualidad.
Para ello, se establecen tres periodos de estudio: 1) Dictadura y Bando Nº19 (1984), 2) Blanqueamientos y transición democrática (1990-2000), 3) Silencios contemporáneos (2012-2021).
Mientras tanto aparece la imagen…
Los días 4 y 5 de septiembre de 1984 tuvo lugar una extensa jornada de manifestaciones en Chile. Bajo la consigna “Sin protesta no hay cambios”, la sociedad civil ocupó diferentes espacios públicos y realizó una serie de acciones para deomostrar su descontento con la situación política y económica que atravesaba el país. Lo anterior dejó a cientos de personas heridas y detenidas, además de terminar con la vida del sacerdote francés André Jarlan. A continuación, la junta militar emitió el Bando No19, que prohibía a las revistas Apsi, Análisis, Cauce y Fortín Mapocho “publicar imágenes de cualquier naturaleza”. Ante ello, estos cuatro medios de oposición tomaron la decisión de mantener la diagramación original de sus páginas, pero en el lugar donde irían las fotografías, ubicar espacios en blanco, negro y otras inscripciones gráficas, con el objetivo de enunciar la ausencia y denunciar, de manera irónica, la censura impuesta por el poder político militar. En paralelo, las fotografías censuradas se deslizaron por otras superficies, que excedían las páginas de las cuatro revistas referidas y permitían revelar el contenido de cada imagen: afiches, páginas de otras revistas, videos y una exhibición de las fotografías censuradas en el Círculo de Periodistas, a la que acudió un número importante de personas.
A partir de lo anterior, el proyecto Mientras tanto aparece la imagen… propone una curatoría con dos núcleos principales: por una parte, los documentos recabados en torno a la protesta mencionada (panfletos, comunicados de prensa, fotografías de protestas contra la censura), las revistas censuradas (páginas sin imágenes, artículos sobre este hecho publicados en las mismas), dispositivos gráficos y audiovisuales por donde sí circularon las imágenes (registro de la exposición de las fotografías en el Círculo de Periodistas, páginas de otras revistas, afiche, documental). Luego de este primer núcleo y a partir del resultado visual que supuso la falta de información sobre las cuatro revistas, la curatoría se aboca a distintas obras de arte, elaboradas desde la dictadura hasta la actualidad, que abordan acontecimientos y faltas ocurridas de manera contemporánea al caso de 1984 hasta la actualidad. Estos trabajos dialogan visualmente con el primer núcleo y permiten generar una genealogía de imágenes en falta, campos de vacío y desvanecimiento de la información. Los artistas comprendidos corresponden a Roser Bru, Alfredo Jaar, Rodrigo Cociña, Mario Fonseca, Elías Adasme, Patricio Vogel, Paula Arrieta y Camila Ramírez.
El lugar donde se pretende realizar esta exhibición final es el ex Palacio Arzobispal de Santiago, lugar en cuyos exteriores fueron tomadas las fotografías censuradas de aquellas jornadas de protestas y donde además funcionaba la Vicaría de la Solidaridad. Así, el proyecto pretende revisar un hecho específico, las distintas repercusiones mediáticas y visuales que supuso y sus reflejos en diferentes trabajos artísticos, los que permiten elaborar una genealogía y extender la lectura de esta manifestación ciudadana más allá de su especificidad temporal.
La investigación de Cristian Vargas Paillahueque, titulada “Wiñokintun [“mirar atrás”]. Arte Mapuche contemporáneo, 30 años”, busca generar una panorámica amplia de la producción visual de artistas mapuche como parte de un ciclo descolonizador y que no ha sido abordado en las historias del arte local. Para ello, se distinguen tres periodos: 1) campo cultural y descolonización (1992-2006), 2) Reflexiones sobre la contemporaneidad (2006-2011), 3) Correlación de estéticas insurrectas (2011-2019).
Wiñokintun, arte mapuche contemporáneo, 30 años.
En lengua mapuche, wiñokintun significa “mirar hacia atrás”, o también, “volver a mirar algo”, y es el término que, en esta exposición, invita a reflexionar la amplitud de luchas del pueblo mapuche reivindicando que el arte tiene y ha tenido un espacio de relevancia. Es un concepto que permite volcarnos simultáneamente hacia el pasado y el presente en la diversidad de sentidos que implica este ejercicio, donde se tejen traman de memorias y resistencias desde múltiples fugas.
La exposición construye un recorrido histórico colectivo, desde los años noventa a la fecha, en donde el impulso descolonizador se perfila como su principal característica, plasmado en diversas temáticas como la problematización de la identidad, la migración, el género y la crítica extractivista. Todo ello entrelaza una retrospectiva diversa de la historia cultural del pueblo mapuche. Wiñokintun es también una toma de posición de la noción de contemporaneidad puesta en juego, una defensa, una provocación contra las miradas reductoras que ven –o desean ver– en lo indígena un reducto de pasado inmutable. Contrario a ello, esta retrospectiva busca situarse desde dos matrices reivindicatorias: por un lado, resituar una escena autónoma que reorienta la producción artística mapuche en el contexto local, discutiendo las exclusiones históricas y lugares comunes que se le ha asignado a dicha producción. En segunda instancia, es una exposición que instala un panorama de problemáticas por las que han transitado las obras de diversos artistas mapuche en los últimos treinta años como parte de un largo proceso de reflexión estética.
Así, la exposición recoge el trabajo de diez artistas que en su conjunto plantean obras en distintos formatos, tanto audiovisuales, pictóricos, escultóricos, performance e instalación: Eduardo Rapimán, Carlos Gaminao, Lorena Lemunguier, Loreto Millalén, Bernardo Oyarzún, Francisco Huichaqueo, Paula Coñoepan, Sebastián Calfuqueo, Paula Baeza Pailamilla y Gonzalo Castro Colimil, constituyen la muestra.
Wiñokintun pretende ser una propuesta por indexar al relato historiográfico del arte que exponga la diversidad del pensamiento descolonizador mapuche.
Fotografías @Jota Jiménez
Colaboran:
Imagen de portada: Recomposición familiar, 2021 de Paula Coñoepa
Esta exposición forma parte del
programa anual de exposiciones del CCESantiago que giran en torno a las
artes visuales contemporáneas.
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